Hechos: 5:36: ” Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; al
que se agregó un número de hombres como cuatrocientos: el cual fué matado; y todos los
que le creyeron fueron dispersos, y reducidos á nada. Después de éste, se levantó Judas
el Galileo en los días del empadronamiento, y llevó mucho pueblo tras sí. Pereció también
aquél; y todos los que consintieron con él, fueron derramados. Y ahora os digo: Dejaos de
estos hombres, y dejadlos; porque si este consejo ó esta obra es de los hombres, se
desvanecerá”
Teudas es un personaje poco nombrado en las escrituras, este hombre es descrito por
Lucas en el libro de los hechos, quien relata que Teudas se levanto como alguien en Dios y
consiguió muchos seguidores.
Teudas fue posiblemente un falso profesta o mesias judío. Josefo confirma la historia,
aunque su cronología es un poco diferente. Según el historiador judío Teudas fue un falso
profeta, algo mago, que persuadió a muchas personas para que tomaran sus posesiones y
le siguieran hasta el Jordán, el cual se abriría por su voz. Los romanos enviaron un
escuadrón de caballería que les atacó. Teudas fue decapitado y su cabeza enviada a
Jerusalén, sus seguidores fueron muertos o lo perdieron todo.
Yo concibo el carácter de Teudas y sus seguidores imaginándome el cuadro de sus
predicaciones, los veo como hombres convencidos de sus predicas novedosas para el
judaísmo y como líder espiritual de muchos. No dudo en nada que sus mensajes estuvieran
llenos de citas de la Tora, ó que su ministerio hiciera creer a cualquiera que aquello que
Teudas hacia era voluntad de Dios.
No imagino a un Teudas fiel al clero de su época (sacerdocio levítico) mas bien lo veo
como un hombre que pretende serle fiel a Dios ante los hombres, que en su interior
justificaría su separación con la corrupción del sacerdocio de Levi. A fin de cuentas
supongo que el se decía; “ El Senor es tardo para la ira y grande en misericordia” (Nahum
1:13). Tal vez utilizaría cualquier otros versiculos y argumento para respaldar su misión, se
compararía con Eliseo, Moisés, Ezequiel, Jeremías, etc.
La enseñanza espiritual es esta, hoy en día y siempre, muchos hombres se han levantado
en el nombre de Dios a proclamar mensajes, no dudo que sus intenciones luzcan buenas
ante los hombres, tampoco dudo que muchos sean arrebatos de emoción mas que por el
Señor. Muchos se compararan con Juan el bautista, Pablo, Pedro, ó el mismo Jesucristo,
saldrán a predicar y pedirán diezmos porque así esta escrito, y a través de la interpretación
personal de la palabra añadirán ó pasaran por alto muchos componentes de la totalidad del
mensaje original del evangelio.
Del libro de los hechos podemos aprender algo de Gamaliel; Dejaos de estos hombres, y
dejadlos; porque si este consejo ó esta obra es de los hombres, se desvanecerá: Gamaliel
sin saberlo esta utilizando el principio que Jesús enseño en la parábola del trigo y la cizaña;
(Mateo:13:30: Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la
siega yo diré á los segadores: Coged primero la cizaña, y atadla en manojos para
quemarla; mas recoged el trigo en mi alfolí).
Si usted es seguidor de Cristo me gozo en el espíritu por usted, mas es necesario que
todos comparezcamos ante el tribunal de Cristo a dar cuenta por nuestros pecados y dividir
el cuerpo de Cristo es un pecado muy grande. Si existe ignorancia en algo podrán
escudarse, pero venida la luz no podemos participar en dividir el cuerpo, Teudas y todos
los hombres similares a el darán cuenta por sus pecados y sus seguidores han participado
de lo mismo.
Gracias a Dios, nuestra Iglesia ha pasado esta prueba pues hemos estado presente por
2000 años y hemos pasado tiempos terribles desde afuera y desde adentro y aca estamos.
Cuando tu pseuda Iglesia tenga 2000 años y permanezcan, hablaremos, lo dificil para
ustedes es que cuando ustedes (si llegan) cumplan 2000 años, nosotros tendremos 4000,
asi que no hay arreglo. No sigas a Teuda si no lo quieres peder todo, hasta la vida eterna.
Porque, Si alguno viene á vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le
digáis: ¡bienvenido! Porque el que le dice bienvenido, participa de sus malas obras.
(2Jn:1:10)