Nuestra Iglesia que es la Iglesia verdadera de Jesús en los últimos 40 0 50 años ha sido infiltrada por liberales los cuales entienden o tratan de entender a Dios con la mente, no con el espíritu y menos por el Espíritu…lo que su mente no entienden lo tuercen y lo desvirtúan eso se llama Gnosticismo y es una herejía del Siglo I. Es el querer llegar a Dios por la inteligencia y no por la Fe. De esto hablamos y esto tenemos.
Estas gentes reducen la Poderosa Palabra de Dios a una serie de cuentos absurdos haciendo de la Obra de Jesús un polichinela sin poder de salvación, llegando el algún caso hasta negar la resurrección de Jesús, la Eucaristía y el Parto Virginal…ya podrás imaginarte quien está detrás de ello.
El Milagro de la Multiplicación de los panes apunta a la Eucaristía igual que el caminar de Jesús sobre las aguas, ellos quieren desvirtuar esto para desvirtuar la Eucaristía (muchas veces lo hacen sin saber, solo por seguir «modas» en la FE)
Dice el Evangelio según San Juan 6,1-15.
«Después de esto, Jesús atravesó el mar de Galilea, llamado Tiberíades. Lo seguía una gran multitud, al ver los signos que hacía curando a los enfermos. Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos.
Se acercaba la Pascua, la fiesta de los judíos. Al levantar los ojos, Jesús vio que una gran multitud acudía a él y dijo a Felipe: «¿Dónde compraremos pan para darles de comer?». Él decía esto para ponerlo a prueba, porque sabía bien lo que iba a hacer.
Felipe le respondió: «Doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan».
Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: «Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente?».
Jesús le respondió: «Háganlos sentar». Había mucho pasto en ese lugar. Todos se sentaron y eran uno cinco mil hombres. Jesús tomó los panes, dio gracias y los distribuyó a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que quisieron. Cuando todos quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: «Recojan los pedazos que sobran, para que no se pierda nada».
Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos que sobraron de los cinco panes de cebada. Al ver el signo que Jesús acababa de hacer, la gente decía: «Este es, verdaderamente, el Profeta que debe venir al Mundo». Jesús, sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez solo a la montaña. «
Ahora bien, si Felipe dijo que «doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan» entonces quiere decir que sí era muchísima la gente que los seguía. Hagamos un poco de cálculos:
1 denario = una jornada de trabajo, en dólares serían 11 USD.
200 denarios = 2200 USD
Obviamente estos números son para «jugar» un poco y no puedo pretender que Felipe tenía una calculadora en la mano… Pero 200 denarios de pan son mucho dinero. ¿Cuántos panes me puedo comprar con 2200 USD?
Sigamos calculando:
1 pan grande = 1 USD acá en Miami. Entonces tendría 2200 panes aproximadamente… y que de un pan coman dos personas: tengo 4400 personas comiendo.
¿Para qué sirve todo esto?
Algunos argumentan que los cinco mil hombres es una cifra representativa, es decir, que no eran cinco mil sino muchos. A esto le llaman números gemátricos, es decir, números que no miden una cantidad, sino que tienen un significado concreto para esa cultura (algo así como cuando uno dice que alguien iba muy rápido en un carro: «iba a 1000», aunque en verdad esa no era la velocidad).
A mí, en mi ignorancia, me gusta pensar en que sí era mucha gente. No sé cuántos, pero los 200 denarios me hablan de muchísima gente. Y también me gusta pensar en una multiplicación de los panes en la que Jesús VERDADERAMENTE dio de comer a esa multitud multiplicando los panes, o ¿acaso no era Dios? ¿Acaso Dios, que es capaz de hacer lo MÁS no va a ser capaz de hacer lo menos? ¿Si Dios confecciona la Eucaristía por manos de un Sacerdote, y convierte en su Cuerpo lo que antes no lo era, no será capaz convertir pan de lo que antes no lo era? Negar la multiplicación de los panes como algo imposible (negar lo menos), ¿no puede desembocar en negar la Eucaristía (porque también parece imposible, y sería negar lo MÁS)?
Si la multiplicación de los panes fue simplemente una narración literaria en la cual se habla del «pan de la palabra» ¿entonces por qué la gente quiso hacer rey a Jesús en esta ocasión y en otras no?
Al respecto comparto las opiniones de S. Légasse y X. Léon-Dufour:
“En cuanto al intento de desmitologizar el prodigio viendo en su origen un simple reparto de provisiones, lo único que debemos desear es que esta torpe explicación desaparezca para siempre de la literatura.” (S. Légasse, en: X. Léon-Dufour, o.c., p. 120).
“Este milagro no tiene nada que ver con una excursión en la que se reparte la merienda, sino que tiene como punto de referencia la figura de Dios alimentando a su pueblo en el desierto.” (X. Léon-Dufour, o.c., pp. 321-322).
Esto nos lleva a las siguientes conclusiones:
- Interpretación diversa, acuerdo en el fondo
Cada evangelista narra el hecho desde su propia perspectiva, dando detalles levemente diferentes y aportando matices complementarios a su interpretación teológica.
- Discontinuidad
La multiplicación de los panes evoca diversos episodios del Antiguo Testamento y hace surgir la cuestión del Reino de Dios y del Mesías. Los judíos del tiempo de Jesús esperaban a un nuevo Moisés que habría de renovar el gran prodigio de la época del Éxodo. Ilustraré este punto con dos citas: “En aquel tiempo el maná guardado en reserva volverá a caer y comerán de él durante años, ya que todos han llegado al final de los tiempos” (Apocalipsis de Baruc).
“¿Qué signos quieres hacernos para que te creamos? ¿Qué obra vas a hacer? Nuestros padres comieron el maná en el desierto” (Juan 6,30-31).
No obstante, Jesús rompe con la idea corriente en Israel de un Mesías político y de un Reino mundano al sustraerse a los intentos de la gente que quiere nombrarlo rey, suscitando incluso la incomprensión de sus discípulos. Después de la multiplicación de los panes se pone en evidencia que Jesús pretende liberar a Israel por un camino totalmente inesperado para sus contemporáneos (anuncios de la Pasión).
- Conformidad
El sentido del signo de la multiplicación de los panes está en concordancia con el resto de la revelación cristológica y tiene funciones y significados análogos a los del resto de los milagros de Jesús.
- Estilo de Jesús
A pesar del carácter singularmente maravilloso de este prodigio, no pertenece al terreno de la magia. Jesús actúa, como en los demás milagros, con sencillez y por su propia autoridad. La sobriedad de los relatos hace eco a la del propio Jesús: no dicen cómo se obró el prodigio, sino que todos los invitados comieron hasta saciarse y que se recogieron restos en abundancia.
- Inteligibilidad interna del relato
Los relatos de la multiplicación de los panes tienen una estructura interna coherente, se insertan adecuadamente en el contexto de la crisis de la misión pública de Jesús y se relacionan perfectamente con otros misterios de la vida de Jesús.
- Explicación necesaria
Sólo la realidad histórica del milagro es capaz de explicar y armonizar los siguientes elementos:
Como consecuencia de aquel suceso, Jesús fue considerado como el profeta esperado y se le quiso proclamar rey (cf. Juan 6,14-15). Jesús se rehusó a ser rey, lo cual decepcionó a muchos de sus discípulos, que dejaron de seguirlo (cf. Juan 6,66).
Después de la multiplicación de los panes recrudecieron las discusiones de Jesús con los fariseos y saduceos, quienes le pedían que hiciera una señal (cf. Mateo 16,1-4; Marcos 8,11-13; Lucas 11,29-32; Juan 6,30-31).
Este episodio, al principio incomprendido por los apóstoles (cf. Mateo 16,5-12; Marcos 8,14-21; Lucas 12,1), resultó sin embargo fundamental en su camino hacia la fe en la mesianidad de Jesús (cf. Mateo 16,13-20; Marcos 8,27-30; Lucas 9,18-21; Juan 6,69).
Además, Andrés, hermano de Simón Pedro le dijo: Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos? (Vr. 8-9). Andrés en contraste con Felipe, había investigado cuales eran los recursos de que disponía la multitud y él sabía que no había más, todo lo que había era el almuerzo de un muchacho. La incapacidad humana preparo el escenario para una manifestación de la compasión y poder de Dios». [24
¿¿Hay otras consideraciones…si cada uno traía lo justo para si, como es que sobraron doce canastas??
La primera Multiplicación de los panes abre el capítulo 6 del evangelio de Juan. Más adelante Jesús se encuentra con las mismas personas en la ciudad de Cafarnaúm, que habían ido a buscarlo.8 Jesús les dijo que no fueron a buscarlo por haber visto signos [milagros], sino porque habían comido hasta saciarse, y que tiene que trabajar por el alimento imperecedero «que permanece hasta la Vida eterna»9 (ver Profecía de Amós 8.11). Ellos contestaron que sus antepasados habían comido del pan de Dios, el maná del desierto, pero el Nazareno les contestó que ese pan no era de Moisés -como ellos creían- sino que el verdadero Pan descendía del Cielo y venía de Dios. Entonces dijo:
«Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre. El que cree en mí jamás tendrá sed.» (Jn 6.35)» Sus padres, en el desierto, comieron maná y murieron. Pero este es el pan que desciende del cielo, para que aquel que lo coma no muera. Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo.» (Jn 6.51)» Este es el pan bajado del cielo; no como el que comieron sus padres y murieron. El que coma de este pan vivirá eternamente.» (Jn 6.58).
Se ha planteado, además, un paralelismo entre la multiplicación de los panes y la Última Cena.
Esta idea se refuerza porque se utilizan los mismos verbos en ambos pasajes, que se puede notar aún sin saber griego viendo el texto resaltado:
Marcos 6.41: ΚΑΙ ΛΑΒΩΝ ΤΟΥΣ ΠΕΝΤΕ ΑΡΤΟΥΣ ΚΑΙ ΤΟΥΣ ΔΥΟ ΙΧΘΥΑΣ ΑΝΑΒΛΕΨΑΣ ΕΙΣ ΤΟΝ ΟΥΡΑΝΟΝ ΕΥΛΟΓΗΣΕΝ ΚΑΙ ΚΑΤΕΚΛΑΣΕΝ ΤΟΥΣ ΑΡΤΟΥΣ
Marcos 14.22: ΚΑΙ ΕΣΘΙΟΝΤΩΝ ΑΥΤΩΝ ΛΑΒΩΝ ΑΡΤΟΝ ΕΥΛΟΓΗΣΑΣ ΕΚΛΑΣΕΝ ΚΑΙ ΕΔΩΚΕΝ ΑΥΤΟΙΣ ΚΑΙ ΕΙΠΕΝ ΛΑΒΕΤΕ ΤΟΥΤΟ ΕΣΤΙΝ ΤΟ ΣΩΜΑ ΜΟΥ
Por último, leamos con detenimiento estos pasajes evangélicos
San Mateo 16:8-10
[8]Mas Jesús, dándose cuenta, dijo: «Hombres de poca fe, ¿por qué estáis hablando entre vosotros de que no tenéis panes? [9] ¿Aún no comprendéis, ni os acordáis de los cinco panes de los 5.000 hombres, y cuántos canastos recogisteis? [10] ¿Ni de los siete panes de los 4.000, y cuántas espuertas recogisteis?
San Marcos 8:18-21
[18] ¿Teniendo ojos no veis y teniendo oídos no oís? ¿No os acordáis de
[19]cuando partí los cinco panes para los 5.000? ¿Cuántos canastos llenos de trozos recogisteis?» «Doce», le dicen. [20] «Y cuando partí los siete entre los 4.000, ¿cuántas espuertas llenas de trozos recogisteis?» Le dicen: «Siete.» [21]Y continuó: «¿Aún no entendéis?»
¿¿Acá vemos como el Señor Jesús mucho después del hecho les recuerda a los Discípulos la Multiplicación de los panes?? ¿Si no paso, para que se los iba a recordar? (a no ser que vengan ahora a decir que tampoco Jesús dijo esto y entonces el Evangelio sería un cuento de viejas.
Así que quien niega este milagro está negando la Eucaristía, Bendiciones+